Casa Brugal, que produce desde 1888 destilados que hoy son admirados en los cinco continentes, ahora también distribuye en República Dominicana algunas de las más grandes marcas de espirituosas. Para celebrar eso tiene un invitado de honor: Charlie Whifield, el embajador internacional del whisky más preciado del mundo.
En una cena maridaje y una cata exclusiva, Whifield presentó en el mercado dominicano la Serie 1824 de The Macallan, un single malt que ha merecido los máximos elogios, tanto en Escocia, su país de origen, como entre los catadores que persiguen por todo el mundo las verdaderas obras de arte del mundo de la destilación.
“Siento una profunda admiración por los destilados de Casa Brugal, para mí fue un verdadero honor aceptar la invitación de compartir, con los dominicanos que más saben del mundo de las espirituosas, la Serie 1824 de The Macallan, donde nuestros maestros madereros dieron con las mejores barricas, esas que podían ofrecernos el mundo sensorial que buscábamos”, dijo Charlie Whifield.
Augusto Ramírez, presidente ejecutivo de Brugal, agradeció al invitado de honor y a todos los participantes en el gran debut de la Serie 1824 de The Macallan en República Dominicana. “Durante 125 años aprendimos a producir uno de los mejores destilados del mundo. Ahora nuestro portafolio se ampliará con espirituosas que se consideran verdaderas joyas”, dijo Ramírez.
Fundada en 1824, Macallan es una de las destilerías de whisky de malta más exclusivas. Está situada cerca de Easter Elchies House, en Craigellachie, en el mismo corazón de la célebre región de Speyside. No todos sus secretos están dentro de Escocia, una parte de ellos se esconden en los robledales de Galicia y Norteamérica, donde se producen las mejores barricas para añejamiento del mundo.
“The Macallan mantiene la política sobre maderas y barricas más rigurosa, respetada y admirada del mercado. Ese hecho ha cambiado de manera definitiva la historia del whisky de malta y ha logrado que la leyenda de The Macallan se escriba botella a botella.”, aseguró Augusto Ramírez.
