Por primera vez desde 2008 el crecimiento económico promedio de Latino América se ve disminuido. La economía de Brasil, la mayor de la región, se expandió marginalmente en el primer trimestre, acumulando un 1,9% que comparado con las estimaciones de 2,4% queda muy por debajo de lo esperado, esto se suma las declaraciones del ministro de hacienda, Guido Mantega, de que reduciría sus previsiones de crecimiento a 3,5% para todo el 2013. La desaceleración es fundamentalmente producida por una caída en la demanda de materias primas por parte de China. La tendencia se verifica en las principales economías latinoamericanas.
