Botellas y latas de Coca-Cola Zero fueron cuidadosamente apiladas en una pirámide invertida, un espectáculo impensable pero funcional para los compradores. Este montaje buscaba reflejar la promesa de Coca-Cola Zero: hacer lo imposible posible.
La pirámide invertida separó efectivamente a Coca-Cola Zero de las demás sodas en las góndolas. La prueba de esto es que se registró un incremento de un 13% en las ventas a partir de la instalación de estos stands especiales en supermercados seleccionados.
Agencia: Leo Burnett Manila, Filipinas
Directores Creativos: Raoul Panes, Alvin Tecson
Directores de Arte: Mon Pineda, Farlet Vale, Steph Mangalindan
Copywriters: Therese Endriga, Cey Enriquez
Fecha: 2009